Dice Guy Kawasaky en su libro El arte de empezar “Ser emprendedor no es un puesto de trabajo. Es la actitud mental de la gente que quiere alterar el futuro” y sí, las ganas de cambiar el presente y vislumbrar un futuro mejor en el que se deje huella, es algo que nos identifica a los emprendedores.
Empezar es mágico, es tener un lienzo en blanco esperando por ser tocado y cuando se es emprendedor no importa cuántas veces haya que hacerlo, siempre habrá algo que nos motiva y nos impulsa a vislumbrar un nuevo futuro y a levantarnos cada día en busca de ello.
Después de haber pasado por algunos momentos personales complejos, derivados de emprendimientos anteriores de corta vida, (mal haría en llamarlos fallidos, ya que los aprendizajes que quedan de estas experiencias son vitamina para lo que viene) y en la búsqueda de crear alternativas que me permitieran poder pasar tiempo de calidad con mi hija Luciana que me permita aportar aprendizajes útiles para su vida. Comencé a idear, prototipar y a mostrar a personas cercanas lo que sería el nuevo lienzo en blanco que hoy se llama La Lora Carola, gracias a la aceptabilidad y apoyo que recibí en las opiniones de quienes vieron el piloto de la marca, empecé este maravilloso camino para darle alas a La Lora Carola.
Inicialmente y como varios emprendimientos en Colombia inicié con pocos recursos, pero los suficientes para sacar un sueño adelante, primero monté un sitio web, las redes sociales y empecé a trabajar en el material gráfico, desarrollo de kits y todo lo que pudiera ayudarme a empezar a volar.
En este proceso de construcción, llegó a mí información del Fondo Emprender, un programa del Gobierno de Colombia en alianza con el SENA que busca incentivar la creación de empresas formales a través de capital semilla para sacar adelante ideas de negocio innovadoras, así que tomé acción, asistí a la jornada de información que es el gran comienzo de este camino; vi que mi proyecto reunía las características necesarias para aplicar al programa y comenzó el trabajo fuerte de planeación y formulación del negocio, de la mano de expertos del SENA, cabe anotar que el hecho de formular el plan de negocio en compañía de los mentores del SENA, no garantiza que se acceda a los beneficios del programa, ya que esta es solo una fase de formulación y después es necesario que el gobierno abra convocatorias que de acuerdo al tipo de empresa que se esté creando será posible aplicar a estas.
A cada convocatoria se presentan centenares de planes de negocio de toda Colombia, y solo los más sobresalientes e innovadores, de acuerdo a los evaluadores del gobierno, se hacen acreedores a los beneficios del programa.
Por todo lo que mencionamos anteriormente, nos llena de orgullo y satisfacción contar que somos uno de los emprendimientos elegidos entre tantos planes de negocio con alto potencial que se presentaron en la convocatoria de economía naranja en 2019 provenientes de todo el país.
Este empujón nos ha permitido consolidar un sueño llamado LA LORA CAROLA, que, con disciplina, trabajo y mucho empeño, queremos que vuele alto y aporte en gran medida al desarrollo y al entretenimiento de nuestra niñez.
Agradecemos siempre a quienes han estado entes, durante y quienes sin lugar a duda harán parte del gran vuelo de La Lora Carola.